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Con el lanzamiento del nuevo Mazda6e, la filosofía de conducción Jinba Ittai de Mazda ha entrado en otra era. Una en la que esa legendaria conexión entre el conductor y su vehículo se traslada a la movilidad eléctrica. Cada detalle del vehículo está dirigido a ofrecer un manejo preciso. Una respuesta intuitiva y una sensación natural de control. En definitiva, para crear esa sensación de unidad entre el conductor y el coche. Lo que Mazda llama Jinba Ittai.
Se ha hecho un ajuste de precisión del comportamiento dinámico de este cinco puertas. Inspira confianza y ofrece un placer de conducción imborrable. La combinación de un puesto de conducción envolvente y de unos asientos de diseño ergonómico aporta una garantía absoluta de claridad, confort y control. Incluso en los desplazamientos más largos.
Los clientes pueden elegir entre dos motorizaciones eléctricas. Una de 190 kW (258 CV) y otra de 180 kW (245 CV).
Las dos configuraciones son de tracción trasera. Ofrecen 320 Nm de par. Garantizan una aceleración suave y una excelente respuesta. El modelo pasa de 0 a 100 km/h en menos de 8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 175 km/h.
Como todos los modelos de la marca destinados a Europa, en el nuevo Mazda6e se suman las aportaciones de los ingenieros de Mazda en Hiroshima (Japón) y Oberursel (Alemania). Supone un esfuerzo por dar satisfacción a las expectativas de los clientes europeos.
La dirección, la suspensión e incluso los pedales se han sometido a un meticuloso proceso de ajuste. Este se traduce una sensación de conducción armoniosa y placentera. Son varios los factores que contribuyen a la sensación de confianza y una respuesta directa. Por ejemplo, la tracción trasera, la suspensión multibrazo trasera o el reparto del peso al 50:50 entre los dos ejes. El momento se inercia se ha adaptado a la percepción humana.
En paralelo, las características de la dirección y de los amortiguadores mejoran la precisión de cualquier maniobra.
Un sistema integrado de control de los frenos hace posibles unas transiciones más fluidas entre la aceleración, el frenado y los virajes. Con mejoras tanto en la estabilidad como en el confort de marcha. El deflector trasero se despliega automáticamente al alcanzar los 90 km/h. Aumenta la carga aerodinámica y optimiza la estabilidad a alta velocidad.
El Mazda6e ofrece tres modos de conducción: Normal, Sport e Individual. Cada conductor puede adaptar la experiencia de conducción a su estilo individual.
El modo Normal está pensado para una conducción fluida, con un buen balance entre autonomía y prestaciones.
Resulta ideal para el uso diario. La aceleración es suave y los ajustes tanto del frenado regenerativo como de la resistencia de la dirección asistida son estándar.
El modo Sport busca una experiencia más intensa y dinámica. La aceleración es más potente, el frenado regenerativo está ajustado a un valor intermedio y la dirección presenta una mayor resistencia, para tener un mejor tacto de la carretera.
En el modo Individual, el conductor puede configurar libremente las características de aceleración, frenado regenerativo y dirección. La aceleración puede ajustarse a un valor medio o alto. Se combina con cuatro niveles de frenado regenerativo —bajo, estándar, medio y fuerte—. También con dos puntos de resistencia de la dirección: normal y deportiva.
El nuevo Mazda6e representa la evolución del concepto Jinba Ittai para la era eléctrica. Conserva esa experiencia de conducción tan característica de sus predecesores. Pero introduce una nueva dimensión de precisión, capacidad de respuesta y refinamiento. Cada aspecto de su diseño contribuye a una experiencia de conducción dinámica, atractiva e inconfundiblemente Mazda.
El nuevo Mazda6e fusiona acabados artesanales japoneses, un diseño cuidado hasta el último detalle y tecnologías de vanguardia.
